jueves, 24 de enero de 2008

Proyección

Hace poco leí el libro de Jorge Bucay "Déjame que te cuente", en el que encontré este cuento que me parece muy interesante y que refleja algunos de los temas sobre los que he estado reflexionando últimamente en este blog.

La esposa sorda

Un tipo llama al médico de cabecera de la familia:
-Ricardo, soy yo: Julián.
-Ah, ¿qué dices, Julián?
-Mira, te llamo preocupado por María.
-Pero, ¿qué pasa?
-Se está quedando sorda.
-¿Cómo que se está quedando sorda?
-Y si, viejo, necesito que la vengas a ver.
-Bueno, la sordera en general no es una cosa repentina ni aguda, así que el lunes tráemela al consultorio y la reviso.
-Pero
, ¿te parece esperar hasta el lunes?

-¿Cómo te diste cuenta que no oye?
-Y... porque la llamo y no contesta.
-Mira, puede ser una pavadita como un tapón en la oreja. A ver, hagamos una cosa: vamos a detectar el nivel de la sordera de María: ¿dónde estás tú?
-En el dormitorio.
-Y ella, ¿dónde está?
-En la cocina.
-Bueno
, llámala desde ahí.

-MARIAAA... No, no escucha.
-Bueno, acércate a la puerta del dormitorio y grítale por el pasillo.
-MARIIIAAA... No, viejo, no hay caso.
-Espera, no te desesperes. Toma el teléfono inalámbrico y acércate por el pasillo llamándola para ver cuándo te escucha.
-MARIAA, MARIIAAA, MARIIIAAAA... No hay caso, doc.
Estoy parado en la puerta de la cocina y la veo, está de espaldas lavando los platos, pero no me escucha. MARIIAAA... No hay caso.
-Acércate más.
El tipo entra en la cocina, se acerca a María, le pone una mano en el hombro y le grita en la oreja: ¡MARIIIAAAA!. La esposa furiosa se da vuelta y le dice:
-¿Qué quieres?, ¡¿QUÉ QUIERES, QUÉ QUIEREEEES?!, ya me llamaste como diez veces y diez veces te contesté ¿QUÉ QUIERES?... Tú cada día estás más sordo, no sé porqué no consultas al médico de una vez...

Esto es la PROYECCIÓN, cada vez que veo algo que me molesta en otra persona, sería bueno recordar que eso que veo, por lo menos (¡por lo menos!) también es mío...