Todavía no he acabado de leer este libro, por lo que no sé si el final será acorde al planteamiento argumental, que me parece muy bueno, pero os lo recomiendo por un par de ideas. La primera por la importancia que da a la reconstrucción vital, y sobre todo a la historia previa a nuestro nacimiento, a los pequeños detalles y la importancia de nuestras "no decisiones".
Está plagado de frases interesantes y que invitan a la reflexión, y quisiera compartir una con vosotros:
"La separación de hermanos gemelos no es una separación cualquiera. Imagínate que sobrevives a un terremoto y al recuperar el conocimiento te encuentras ante un mundo irreconocible.El horizonte ha cambiado de lugar. El sol tiene otro color. Nada queda del terreno que conocías. Tú estás viva; pero estar viva no es lo mismo que vivir. No es extraño que los supervivientes de semejantes catástrofes suelan desear haber perecido con el resto de la gente"