martes, 18 de enero de 2011

In treatment (En terapia)

En ocasiones me he sorprendido a mi mismo deseando que mis sesiones de terapia fuesen escritas por los guionistas de la serie En terapia (In treatment, HBO) de manera que los diálogos tuvieran siempre una lógica intrínseca, los silencios fuesen siempre significativos y las reacciones emocionales siempre fuesen interpretables. Me he sorprendido a mi mismo deseando que mis intervenciones terapéuticas siguiesen un guión definido, una idea vectorial que guie mis intenciones a una finalidad clara y sencilla, sin perderme en diferentes posibilidades ni quedarme en blanco. Tener casi siempre respuesta (¡y preguntas!) oportunas para todo, que mi comportamiento sea coherente y fácilmente interpretable por un público inexistente.

Obviamente deseo también un sabio director que guie mi interpretación hacia la excelencia, que me marque los puntos clave y los elementos destacables de la confusa realidad, que me dé la seguridad y el apoyo que me falta en los momentos críticos de las sesiones, justo en aquellos en que la persona que acude a realizar terapia conmigo descarga sus emociones y espera que yo sea todo lo seguro y estable como para poder ayudarle a gestionarlas de manera eficiente.

No tengo ese guionista, ni ese director, ni siquiera tengo un escenógrafo que diseñe un espacio de terapia apropiado a mi forma de ser y a mi estilo terapéutico. Tampoco tengo la posibilidad de realizar ninguna toma errónea, este es un detalle importante, puesto que añade un plus de ansiedad mi trabajo. Me puedo equivocar y eso puede ser malo, puede no ser bueno para la persona con la que estoy trabajando.

A pesar de no tener nada de todo esto, y muchas otras cosas que no se me ocurren por no ser experto en el tema, disfruto de a visión de esta serie. Y se la recomiendo ver a mi alumnos de practicum, para que puedan analizar y practicar, pero sobre todo para discutir después teniendo un punto inicio común. Discutir sobre una serie de TV nos permite abstraernos del miedo a equivocarnos, nos permite centrarnos en nosotros mismos sin darnos cuenta, pero sobre todo nos permite expresar puntos de vista propios sin tanto miedo a la valoración externa y por tanto nos facilita más oportunidades de aprendizaje.

Por todo ello doy gracias a Dios (o lo que sea) por la existencia de una serie de TV como esta.