jueves, 19 de enero de 2012

Héroes de mis héroes

Algunas personas aspiran a la gloria, a ser héroes, a marcar una diferencia significativa respecto a los demás. Y viven para ello, viven para obtener ese reconocimiento, viven para dejar huella.
Hay otras personas, muchas realmente, que son menos ambiciosas ya que se limitan a vivir según sus principios, como si eso fuese poco, y cada decisión que han de tomar la pasan por el cedazo de sus valores, de manera que su vida tiene coherencia y es respetada por aquellos que les rodean. A esto se le llama predicar con el ejemplo.
Resulta curioso que al leer biografías de los primeros, de héroes, siempre podemos descubrir en sus paginas a los segundos, conociendo de esta manera a sus Héroes cotidianos. De esta manera, con el tiempo, he descubierto que tengo un grupo de personas que admiro, les llamo "los Héroes de mis héroes". Son personas que nunca se han preocupado por escribir su nombre en la posteridad, de manera que vivieron de manera "anónima", según sus principios. Resultaron ser un ejemplo para las personas de su alrededor, una influencia, una motivación y alguien catalizó todo esto y otras muchas cosas para trascender a todos los demás. Para ser un héroe. Pero, sin sus Héroes, seguramente no lo habrían hecho. Y al leer su biografía, su ejemplo es muy alentador.
He descubierto que cuando releo alguna de esas biografías, en muchas ocasiones estoy buscando a aquellos que no aspiraron a trascender ni a dar lecciones, sólo aspiraron a dar ejemplo.
Y desde hace unos años disfruto encontrando gente así, gente que sin saberlo motiva a los demás, que ofrece su conocimiento, su ejemplo para que los demás piensen, avancen, para que crezcan.
 Estos son los verdaderos maestros, ya que siempre desean ser superados por sus discípulos.