lunes, 29 de abril de 2013

Ser fan

Ser fan implica ser fanático, de ahí su nombre. El fan está obsesionado con su ídolo, lo adora en todas las maneras posibles, quiere su bienestar incluso por encima del suyo propio, y no le importa ser ignorado e incluso despreciado por él o ella, con tal de llamar su atención... ya se sabe son personas que no pueden estar por todo y los fans somos así, gratuitos.
Ser fan también implica ponerse como loco/a cuando el ídolo te presta algún tipo de atención o tiene algún tipo de consideración. Los fans llaman a esto humildad del ídolo, para muchos otros no es más que un acto de tirar migajas de cariño para que sigan ahí.
¿Y qué pinta esta reflexión en un blog de psicoterapia? Tengamos en cuenta que los fenómenos de fans que observamos en tv son inmediatos, un determinado cantante saca un disco y la discográfica ya le organiza un club de fans que canaliza todas las energías de aquellos que están deseando adorar algo, lo que sea. Pero en la vida real, en la vida que requiere tiempos de cocción más pausados, también se da el fenómeno fan, y de una manera más cruda y dolorosa, como por ejemplo en las relaciones de pareja.
Cuando vemos relaciones en las que uno de los dos miembros de la relación se somete a los deseos del otro lo que estamos observando es la foto casi definitiva de un fenómeno que tiene mucha historia pasada, ya que nadie se resigna a adorar al otro de buenas a primeras. Para ello uno tiene que buscar alguien que adorar y el otro alguien que le adore. Y no es necesario que ninguno de los dos sea consciente de ello. El primero costumbra a ser un narcisista (en cualquiera de sus diversas modalidades) y el segundo un dependiente. Estas personalidades se sienten cómodos así, esta forma de interacción da sentido a sus vidas.  El problema es cuando no somos así y se espera que lo seamos. Entonces la cosa se complica, tanto si eres el adulado como si se espera que adules.
Ser fan es un proceso natural elegido por uno mismo desde la libertad, sabiendo que puede escoger ser pareja paritaria si quiere.