lunes, 2 de marzo de 2015

Resolver el rompecabezas del problema

- ¿Cómo lo harías?
- La mejor opción es siempre aquella que es más sencilla, menos dolorosa y más efectiva.
- ¿Cuál es esa?
- Yo lo haría como si resolvieses un rompecabezas.
- ¿Cómo?
- ¿Nunca has resuelto un rompecabezas?
- No tengo la paciencia necesaria...
- ¿Nunca has resuelto un rompecabezas por pequeño que sea?
- Supongo que sí, yo qué sé...
- No es necesario que lo hayas hecho, vamos a ver... Si yo te pido que resuelvas un rompecabezas, ¿Cómo lo harías? Quiero decir, yo te pongo todas las piezas tiradas por la mesa y tienes que formar una imagen con ellas, ¿Qué es lo primero que harías?
- No sé... Supongo que buscarías las piezas de los bordes...
- Correcto. ¿Por qué? ¿Por qué no buscar piezas del centro que formen una imagen y desarrollar la imagen hacia fuera?
- Supongo que lo que pasa es que sólo hay un tipo de fichas del borde y así das un marco de referencia, ¿no? todo el resto de fichas del puzle tienen que caber dentro. De la otra manera no sabes cómo de grande es el puzle...
- Estoy de acuerdo. Los bordes del puzle dan la referencia al contenido. Si tienes que pasar esto al problema que me explicas, ¿Cómo lo harías?
- ¿Cómo busco las piezas exteriores de mi problema?
- Tal y como yo lo veo puedes buscar en la parte exterior o profunda del problema...
- Entonces tengo que empezar por la superficie... Así sabré donde finaliza el problema, ¿no?
- Correcto. La mejor solución es siempre la que va desde lo superficial a lo profundo. Así también podrás acostumbrarte cada vez mejor a la profundidad y verás mejor los detalles, ¿No te parece?